
Mono capuchino pardo
Sapajus apella

Mono capuchino pardo, primate ágil y observador
El mono capuchino pardo (Sapajus apella), también conocida como capuchina crestada, es un pequeño primate originario de Sudamérica. Su área de distribución se extiende desde Venezuela hasta el norte de Argentina. Ocupa principalmente selvas tropicales, pero también puede vivir en áreas boscosas más abiertas, siempre que haya suficiente alimento y refugio.
La especie está clasificada como de menor preocupación (LC) por la UICN. Permanece relativamente extendida, incluso si algunas poblaciones locales están debilitadas por la deforestación y el comercio ilegal de animales salvajes. En su entorno natural, el mono capuchino pardo participa activamente en la dispersión de las semillas, contribuyendo así a la renovación de la vegetación forestal.
Este primate mide en promedio entre 35 y 45 cm, sin incluir su larga cola prensil, casi equivalente a la longitud de su cuerpo. Su pelaje varía de marrón oscuro a marrón dorado, y su cabeza está marcada por una característica abubilla. Es omnívora y consume frutos, semillas, insectos, huevos y, a veces, pequeños vertebrados. Sus manos muy hábiles le permiten manipular su entorno con precisión.
El mono capuchino pardo es famosa por sus altas capacidades cognitivas. Es capaz de explorar, probar y resolver situaciones nuevas. Esta inteligencia, combinada con una gran agilidad, lo convierte en uno de los primates más adaptables de su grupo.
En el zoológico de Martinica, como el Monos de Ateles, El mono capuchino pardo evolucionan en un entorno con vegetación, integrado en el jardín botánico Habitation Latouche. Su observación nos permite comprender mejor el comportamiento de los primates y su papel esencial en los ecosistemas tropicales.















Quelques anecdotes

Un mono ingenioso
El capuchino parda es famosa por su extraordinaria inteligencia. En la naturaleza, a veces usa piedras o ramas como herramientas para abrir nueces o cazar insectos. Este comportamiento, que también se observa en los chimpancés, atestigua su capacidad de aprendizaje y transmisión social.

Una vida social a buen ritmo
Los capuchinos viven en grupos jerárquicos de 10 a 30 individuos liderados por un macho dominante. Muy sociables, pasan gran parte del día interactuando, acicalándose y jugando. Estos estrechos vínculos refuerzan la cohesión del grupo y ayudan a la supervivencia en la naturaleza, especialmente frente a depredadores como el jaguar.
